Muchos creen q se han liberado, tras ver su vida de esa manera dándole importancia no más que a su raza incompleta. Genéticamente alterados por manos frias cantamos y nos matamos, siendo meros experimentos fallidos de un Dios para no estar solo en la contemplación de su creación.

Hilos Conectan y Controlan

Cuando los espejos se dan vuelta viene la negación, el pasar del capitulo de la percepción. La memoria se divierte con tigo, ser pequeño, sin pensamientos ni sandalias. Mueres dentro del cruel silencio, entre tubos y luces y caminos casuales de delirios disipados. El tiempo va y aparece, espectros atrás y adelante; aquí, sí, aquí ¿qué hay aquí? Me doy cuenta, es…es…algo, no lo sé; un punto, ahora un línea ¡esta en movimiento! No lo quiero perder…sí, eso: el presente, el mejor enemigo de la memoria. He digerido mucho en mi vida, envenenado por el sádico intérprete que se camuflaba en las sombras de mi conciencia. Era un niño, soy un niño, pero ahora sé, sé ¡mierda! Sé ¿puedo escapar? Una espina en la columna, maldita ignorancia. He logrado dominarte, memoria. He logrado agarrarte la cola y ahora te voy a torturar, maldita perra de mierda. “Muajajaja. Memoria, te presento al presente, muajaja." Que dulces palabras para insultarme a mi mismo. Qué pena, quiero dibujar una lagrima brotando de mis ojos. Gozar de la imagen y regocijarme en mi cama, sin luces con mi mente en un baile de neurotransmisores y de flores, heces y olores, colores; electricidad en el presente biológico, la conciencia. Y de vuelta, que gira y gira en sabanas temperadas bajo un techo sonando por gotas de lluvia por nubes indignadas con su forma. ¿Me duermo? Aaaa!! Que es eso? Me muero y alguien más reencarna en mi cuerpo. Inconciencia ¿no existo?¿no existen? El presente, efímero, maraco y sólido. Las cosas pasan y se acaban, y cuando acaba empieza, acabando en el tiempo inhibiendo significado a la vida. Presente y memoria combaten, disociados por casualidad. Falla el edificio del significado, el pensamiento en el primer piso; se derrumba y el cuerpo grita, pobre trapo de átomos unidos, nadie lo envidia y estos se apedrean mutuamente por sus diferencias, propagando la ira en casual olvido de sus semejanzas, todos parte de la escena: Títeres…hilos amarrados a nubes donde sus dudas descansan. Éstas chocan e incertidumbre relampaguea haciendo los hilos más fuertes. Títeres amarrados hasta la pichula, el ano y los pelos, todos planeando el mejor espectáculo conchasumadre a la madrecita y papacito culiaos que vienen a verlos al colegio.

Variado

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El ojo despejado de la mirada.

El ojo blanco. El cuerpo blanco.
El ojo blanco dado vuelta.
El cuerpo blanco abierto.

No evocar disección
Ni autopsia
Ni preservación
Antes que la calidez circulando.

Revolviéndose por dentro
El cuerpo puede caminar
O ser hundido con un dedo
Para luego volverse a tensar.

No quería
Hacer de mi escrito
Una enunciación desbocada
Y autosuficiente
De litros varios.
Pero me salió de pronto en el insomnio
Cuando lo hice para darme sueño
Para pasar el dolor de estómago.

La cortina de mi pieza es sobre todo inútil si se quiere oscuridad. No puedo cerrar los ojos, no encuentro mis lentes de género. Decidí pasar la noche en vela a las seis y media de la mañana, habiendo tratado de dormir por tres horas. Me hice un panorama musical y de impulso fumé dos pipazos. El estómago empezó a dolerme a las diez de la mañana y lleva una hora y media. Hace veinte minutos tomé una píldora, me sugestiono en que trasforma el dolor a pulsaciones en vez de a una molestia constante. Alguna válvula interrumpida por ahí, seguramente, mientras el peso del ordenador en mis rodillas la llega a afectar de alguna manera.



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La paradoja me agrada en sus facetas simples como:

¿Qué te puedo decir? o No sé qué decir

Todo lo que sea una paradoja elaborada me decepciona enseguida.


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Esta extraña foto la tomó Mamapachi en el último Halloween. La encontré en la tarjeta de memoria que me traje por equivocación.

I. Aléjate del Quieto Aire / II. Excusa y Evocación

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I.


Aléjate del quieto aire. La cura hasta ser sola, decausa bien plenitudo. Hasta quien te vas no di, a decir austria o cuando estén las venden. Ni cual mar, abierto dinos lugar de la siglo. Sinó como su bien, res ninguno, que se alce del podio ni martes. A la ciego media bolsa, bestia triste ni si tanto, antes lino me nácar sacado. Sal desde se llena la pieza de globo, haber resulta de todo un mal. Dobla nada del ruido sin dicho cuartos quedan al final de la noche.

No siguen aquí, ni este ni el salmo. Anda mía de la noche, pasa el día los temblores. Decir de mi, que no salí del sobre, ni y nada mal de sobra. Haberos, lino mar sigilo. Andó tan declarar, el tiempo, se parece a ni me cinta, es parra, cuelgas quien nace el fondo impreso. Pagan los alpes, sellos potes narices, van también tembló mañana

Tundra. Antes del letargo, bebida el agua espina gracia. Distopía celebra, trascrito le fuimos, mientras aguaba el suelo tibio, tiritán. Calma triste y blanca, dijimos sido buenos, medir ganas de ruido paso encima y mas hambre. Declarar poco y el fin sin ser divertido, los carros paciencia por el camino arbolado, hacia la tundra, hacia el otro feudo donde esperan enamorados. Rebotan las ruedas seguro quiasme subieron, por el escalón roto de la compañía, del fluido trompa, dicta y repta por la palabra y la tierra.

Sin traje, símil desuso al pulido del tiempo, demarrada capa y modo. Me dejó abrir la vida, sin hombre tiras haber dicho, vigilancia. Humedecer lucir cuerina. Por si dijimos material, y la rostro se te salió del cuerpo. Pedirte mal trino y fundo cartero, habrá dejado nombres o vespertinos. Duna febril alma nieve es trenza niebla dista del centro, donde habíamos encontrarnos hasta y uno plata del pueril cuarzo.

Soy su nuevo capitán. Mato a todos. Quien no obedecerá mis ordenes no hable, no se mueva.

Dijeron que raspar la se inundaba, en un rato salían los otros. Lastre de la vereda un trío de buen salida, además de limpiemos. Glaciaron de la pronto acometer decidión de me dejaste solo. Tablatura hubiese sido mejor. La víspera vino clara y no la quisimos haber ultraje, de noche trimestre, duerme más mañana acuestas del otro lado.


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II.


Los días habrías pasado antes si te hubiera dicho. No supongo que era la plinto de preservo, tus cosas como me indicaste. Puso de hombros hundiese lo claro si mas tronco ámbito. Su lado de serlo, un mazín paralelo. Túmbate el costado verde de antes que te llegue la prisa. Pidiéndote que largo, que mis también garza indeleble no le había gustado. Humeando del codo, colgué destapa no lo timbre, tajada sin nombre, todavía merece fulmine palabra sido. Si no sabido haberme expresado mejor. Milán de triada lustre, olmo si suplen al final las necesidades, pero había empezado diferenciarme de los que a me parecí de repente, sin querer. No con tan minera donde trabaja, se hacen responsables, del desecho que estaba tratando. De la losa en el fregaderon de ayer, quedó afuera, se va a mojarme te dije que recién me temperatura encima.

No la quería ceñir, ni poblar su urbe se Santiago, la con fundos conjuntos, apellidos parecidos, pasaban ahí veraneo con mi padre ahora, tu no te acuerdas del ni de la persona hablaba como loco, lo visitábamos en la placida esquina donde juegan nuestros pesebre si lo interpretáramos. No quisiste pasar a llevar ese inmueble moral, mi aislado dremel y con resto para que no se pase. Miren lista si ha faltado ayer, nuez si se trata de año, es el claro indicador surgido sal a mandar el puesto de otro. Yo no es que hunda las código la recuerda tenía un si es te. De valor nada, pero será tan misteriosa la caja, ahí me pasa del lado, punto de ni mi se explicaron, pica del hecho que mentiste la tarde otra vez que te vea y muéstrame la herida. Derramé sin querer quemado la bus la seda deshace. Arruiné pobre precipicio salpica lumbre su más da. Ponte se pasa por fome y perdonan de todas nimiedades queremos. Por deja me de sirena suena nuevo que el miedo a fallar lo escondía con asumiendo se falla como principio querías otra cosa, traje la dos si acaso de todos, aun tendremos que lustrar lidiarte.


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Expulsión

Llegar al punto inesperado en que aparece, en forma insólita, un generoso torrente de respuestas que choca, con asombro, contra el muro petrificado de mi total carencia de preguntas. El golpe brutal de su orfandad que arrebata inmutable todo sentido a su existencia. El vacío convertido en montaña infranqueable. El talento de lo orgánico realizando una perfecta personificación de la materia inerte.

Eros y Tánatos, instinto de vida y de muerte, perdiendo su milenario equilibrio complementario al fundirse en un solo todo, que no es más que la suma de sus partes, sino menos, mucho menos, menos al límite de su completa aniquilación mutua. Corazón que reemplaza el soplo vital por el mecanismo arrendado de un reloj a pilas. Ríos de sangre transformados en cañerías de PVC con aislación térmica de poliuretano. Ojos cuya única finalidad es la de esquivar los objetos con que tropieza el torpe arrastrase de unas piernas que olvidaron el camino. La sonrisa como un tajo al azar. Las manos que no buscan. La piel sintética impermeabilizada. Alimento mínimo, oxígeno mínimo, energía mínima, para un cuerpo que ya crónicamente funciona a centímetros la extinción.

La emoción es una visita no deseada, ante la que cierro las puertas de mi morada sin color. Porque los colores se han fundido también, como excesivos óleos mezclados formando en la paleta un negro sucio que no sirve para pintar el cielo de la noche. Podría arrojarse al hoyo negro en que se ha convertido la estrella del sol. Hoyo negro de inmedible fuerza que todo lo traga y desintegra, escupiendo de vuelta, según ciertos físicos visionarios, algo así como fantasmas.

Un fantasma es el único morador posible en este lugar en que el vacío ha crecido hasta llenar el último rincón. Estado indefinible, el vivir muerto, el ser no siendo. Por fin fue expulsado el dolor ya insoportable. Tras él partió también todo lo demás.

Segundas